Una tela indispensable
Si contáramos las horas que pasamos durante nuestra vida con una toalla en las manos, o un albornoz en nuestro cuerpo no nos lo creeríamos. Y es que desde que tenemos conocimiento de la importancia de la higiene para nuestra salud, se ha convertido en un utensilio imprescindible para secar nuestro cuerpo. La encontramos en todos los baños de las casas que visitamos, en los hoteles, casas rurales, spa y podríamos seguir con una lista infinita de lugares en los que encontrarla es de lo más común. Por eso en Roly fabricamos nuestras toallas promocionales con minuciosidad.
Un utensilio con historia
Su historia se remonta a épocas remotas. En la antigua Roma ya era habitual que este apreciado utensilio secara el cuerpo de romanos y romanas. Con el tiempo se volvió tan imprescindible como deseada, llegando a ser parte del ajuar de las mujeres. Esto, ha cambiado, porque aunque sea una tradición cercana, como muchas, dejó de existir. Eso sí, cuando nos independizamos, lo primero que compramos para nuestro hogar son sábanas y toallas.
Suave y absorbente
Las hay de muchas clases y tejidos, formas, colores y tamaños. Su delicado uso, y su capacidad de absorción, ha hecho de esta herramienta la compañera perfecta para rituales que tienen que ver con la higiene y con el agua. En Japón existe uno al que llaman “oshibori”, y consiste en una toalla pequeña, enrollada que proporcionan en los restaurantes antes de comenzar a comer. En invierno las sirven muy calientes y en verano frías, muy frías, así limpiarnos las manos también nos produce una sensación de placer. Pero no hace falta irnos tan lejos. En España es muy habitual usarlas en las terapias de masajes, en centros de spa y balnearios, pues húmedas y calientes mejoran nuestra circulación y relajan los músculos.